Mi mamá.
Me encanta ese pelo rubio y ese sol y me imagino que esa tarde debe haber sido divina, a la sombra, a la hora de la siesta.
Los chicos son mis primos. Mi hermana y yo estabamos en sus planes, pero todavía faltaba bastante para nosotras.
Siempre me deslumbró lo linda que era mi mamá. Sigue siéndolo, pero me matan los distintos looks que tuvo en sus veinte: pelo castaño carré, este rubio farrah fawcett, pelucas, batidos, postizos.
De todas maneras las fotos que más me gustan son esas en las que, como en ésta, aparece rubia y rulosa.
Feliz cumple, ma. El sábado te lleno de besos.
Gracias mi amor...!!! Rubia, castaña o pelirroja...siempre serás, como ese día, "mi cielo azul de verano".
ResponderEliminarmamá.
la cara de paulo inconfundible . caro por supuesto hiper rubia , y el preferido en brazos . siempre todo igual .
ResponderEliminarsiempre linda mamá .
te amo . yo también quiero besos .
Que buen recuerdo, Emi! Y si... tu mamá era y es muy linda.-
ResponderEliminarLos chicos, como decía el abuelo Pichin: "No serán muy lindos, pero, gracias a Dios, son sanitos, simpáticos...".-
Pero por sobre todo, esa foto encierra un secreto muy grande. Casi mágico. Una época.-
Una hermosa época donde casi todos, éramos felices: disfrutábamos del sol, los asados del tío y el buen vino, que nos llevaba hasta el amanecer, cuando con los ojos vidriosos, cansados de sueño y sopores etílicos, nos marchábamos a dormir dichosos.-
Dichosos, porque durante la larga noche, habíamos encontrado todas las soluciones a los problemas que nos planteáramos durante la extensa conversación.-
Y al día siguiente, otra vez el sol y la alegría de estar juntos, en familia (que es donde uno se encuentra más seguro).-
Por eso, para mi al menos, esa foto sólo muestra una hendijita, por la que se filtra todo un universo de recuerdos y sensaciones; que llegan frescos como si fueran de hoy...
Es que la felicidad, querida Emi, son esas diminutas grajeitas que uno tomó en dosis narcotizantes, casi como un vicioso; alocadamente.-
Pero que hoy, tienen el efecto prolongado que el recuerdo nos trae. Y al que nos aferramos con desesperación; sabedores, alguno de nosotros, que ya será muy dificil acceder a esa droga maravillosa, en tan diminutas dosis, siquiera.-
Por eso, querida Emi, cuando en un recodo de tu vida linda y jóven, encuentres esas pildoritas tan pequeñas y llamativas, consumilas con imprudencia, casi promiscuamente!
Algún día, como yo hoy, mirando una foto o recordando otros tiempos, sentirás esa sensación tersa y aromática de haber sido feliz; aunque sea, alguna vez.-
El más grande de los besos...
Tío Tetor.-
Emilia! tanto tiempo. entré de pura casualidad, buscando otra cosa y veo que tenés un blog. nos veremos algún día en bahía.
ResponderEliminar